La calefacción de nuestras casas consume más energía y cuesta más dinero que cualquier otro gasto que podamos tener en nuestra vida cotidiana. Las facturas de luz en nuestro país representan aproximadamente el 42% de servicios públicos.
¡Aun así, hay buenas noticias! No importa qué tipo de calefacción tengas en casa, puedes ahorrar dinero y aumentar la comodidad manteniendo y actualizando adecuadamente su equipo. Al combinar el mantenimiento y las actualizaciones adecuadas de los equipos con los ajustes recomendados de aislamiento, sellado del aire y termostato, puedes ahorrar alrededor de un 30% en la factura de luz y, al mismo tiempo, reducir las emisiones al medio ambiente.
Sistemas de calefacción
¿Cuál es el sistema de calefacción más eficiente en función de las necesidades de tu casa? La calefacción es una consideración importante durante los meses de invierno y es necesario saber el precio de instalación de calefacción, así como la más eficiente, económica, duradera y que mejor se adapte a la necesidad del hogar.
Los gastos de calefacción pueden consumir fácilmente casi la mitad del presupuesto medio de energía del hogar, lo que hace que la eficiencia energética sea un objetivo importante para aquellos que desean reducir los gastos de confort en el hogar. Si necesitas un nuevo sistema de calefacción para casa, tienes varias opciones para lograr una operación altamente eficiente y de bajo costo que mantendrá tu casa caliente y cómoda por muchos años.
Calefacción eléctrica
La calefacción eléctrica no es común, ya que es demasiado cara y requiere un buen aislamiento y un sistema permanente de ventilación. Es aconsejable evitar apartamentos totalmente eléctricos en regiones con un invierno frío, como Madrid o el interior de España, ya que las facturas pueden ser astronómicas. Las opciones más económicas incluyen un sistema de acumuladores nocturnos que funcionan con tarifa de noche y radiadores eléctricos que incorporan los últimos avances en ahorro de luz.
Aunque no es la mejor calefacción para hogares mal aislados, estos radiadores, disponibles en tiendas de bricolaje y grandes almacenes, están rellenos de un gel o líquido que retiene el calor. Esto significa que el radiador se mantiene caliente durante más tiempo que un radiador convencional. Son fáciles de instalar, requieren dos soportes de pared y un enchufe y son similares en apariencia y tamaño a los radiadores convencionales. Sin embargo, calentar una propiedad con electricidad nunca es barato y se paga entre 50 y 125 euros al mes durante los meses más fríos, es decir, de noviembre a febrero.
Un aire acondicionado con bomba de calor proporciona refrigeración en verano y calefacción más barata en invierno. Ten en cuenta que si tienes calefacción central eléctrica o aire acondicionado, probablemente debas actualizar su fuente de alimentación.
Calefacción gas natural
La calefacción de gas natural que utiliza bombonas de gas estándar cuesta entre 60 y 150 euros y son una forma económica de proporcionar calefacción en zonas con inviernos suaves. Los calentadores de gas sólo deben utilizarse en habitaciones con ventilación adecuada, inspeccionadas y aprobadas por Repsol Butano, y puede ser peligroso tener una diferencia demasiado grande entre la temperatura interior y exterior. El precio de instalación de calefacción de radiadores no es muy costoso y siempre viene bien que lo haga un profesional que además de instarla, inspeccione la casa y ventilación. Para obtener presupuesto de instalación más económico recurre solo a técnicos profesionales sin ningún tipo de compromiso ya que te asesorarán y se encargarán del mantenimiento de las calderas.
Es posible instalar un sistema de calefacción central que funciona con bombonas de gas estándar, que cuesta alrededor de 2.000 € para una casa pequeña. Los proveedores españoles de petróleo Cepsa y Repsol ofrecen buenas ofertas en calderas de gas natural, incluyendo la financiación a bajo coste de la instalación. Los radiadores de bajo consumo es la opción mas eficiente y económica en nuestro país hoy en día.
Calefacción solar
El uso de la energía solar para el suministro de agua caliente y calefacción es todavía poco frecuente en España, donde la cantidad de energía que proporciona el sol cada año por metro cuadrado equivale a once bombonas de gas. Las casas nuevas suelen estar equipadas con un sistema de energía solar y además el gobierno introdujo una legislación que exigirá que todas las casas nuevas construidas a partir de 2007 cuenten con calefacción de agua con energía solar y (si procede) con calefacción central.
Un sistema de energía solar se puede utilizar para satisfacer todas las necesidades energéticas, aunque normalmente se combina con un sistema de calefacción eléctrico o de gas, ya que normalmente no se puede confiar en él para la calefacción y el agua caliente durante todo el año. Si eres propietario de una vivienda en la costa mediterránea de España, en el sur, en islas Canarias o Baleares, la energía solar es una opción viable y las autoridades (gobiernos regionales y nacionales) ofrecen subvenciones y financiación sin intereses para animar a los propietarios a instalar sistemas de calefacción solar.
El principal inconveniente es el alto coste de instalación, que varía considerablemente en función de la región y de la cantidad de energía que necesite. Un sistema de agua caliente de 400 litros cuesta alrededor de 3.000 euros (los gobiernos regionales y la UE conceden subvenciones y subvenciones) y debe ser instalado por un experto. Las ventajas son la ausencia de costes de funcionamiento, el funcionamiento silencioso y sin mantenimiento, y la ausencia (o muy escasa) de facturas de electricidad. Un sistema debe durar 30 años (normalmente tiene una garantía de 10 años) y puede ser actualizado para proporcionar energía adicional en el futuro. También se puede utilizar para calentar una piscina. Un sistema de energía solar también podría proporcionar electricidad en una casa rural aislada, donde el costo de ampliar la red eléctrica es prohibitivo.
Por lo tanto, la instalación de placas es un gasto de gran importancia si vamos a utilizar calefacción solar. Quizás pienses que no es el sistema de calefacción más barato debido a la instalación. Sin embargo, si se puede conservar y mantener estas placas solares, en menos de 15 años están amortizadas y la factura mensual será menor que otros sistemas de calefacción más eficientes.
Aire acondicionado y calefacción
En algunas regiones, las temperaturas en verano pueden alcanzar más de 40°C y aunque las propiedades están construidas para resistir el calor, es posible que desees instalar aire acondicionado. Ten en cuenta, sin embargo, que puede haber efectos negativos si sufres de asma o problemas respiratorios y es fácil contraer una infección cuando el cuerpo sufre cambios extremos de temperatura. Los aparatos de aire acondicionado cuestan alrededor de 600 € (más la instalación) para una unidad de 596 vatios, lo que es suficiente para enfriar una habitación de tamaño medio. Algunos acondicionadores de aire son ruidosos, así que compruebe el nivel de ruido antes de comprar uno.
Un sistema de aire acondicionado con bomba de calor proporciona refrigeración en verano y calefacción económica en invierno. Un sistema con un compresor exterior que proporciona calefacción y refrigeración radiante cuesta alrededor de 1.200 € por habitación. Si tienes suerte, algunas empresas especializadas ofrecen la instalación de aire acondicionado gratuitamente al realizar la compra.
Consejos para la calefacción
El tipo de calefacción más económica será aquel que se adapte a las necesidades de tu hogar. Aun así, algunos consejos para ahorrar energía son:
– Limpiar y/o reemplazar los filtros de los radiadores una vez al mes o según se recomiende.
– Limpiar los huecos de aire caliente, los calentadores de zócalos y los radiadores según sea necesario. Asegúrate de que no estén bloqueados por muebles, alfombras o cortinas.
– Elimina el aire atrapado de los radiadores de agua caliente una o dos veces al año; si no estás seguro de cómo realizar esta tarea, ponte en contacto con un profesional.
– Coloca reflectores de radiador resistentes al calor entre las paredes exteriores y los radiadores.
– La instalación de suelo porcelánico retiene mejor el calor que otros tipos de suelo más fríos como la piedra o mármol.
– Apagar los ventiladores de cocina, baño y otros extractores en menos de 20 minutos después de que se termine de cocinar o ducharse. Si vas a reemplazar los extractores, considera la posibilidad de instalar modelos de alta eficiencia y bajo nivel de ruido.
– Durante el invierno, mantén las cortinas y persianas de las ventanas orientadas al sur abiertas durante el día para permitir que la luz del sol entre en casa y cerradas por la noche para reducir el frío.
En conclusión, Selecciona productos energéticamente eficientes cuando compres un nuevo equipo de calefacción. A día de hoy, es muy sencillo encontrar hojas de datos de energía para diferentes tipos, modelos y diseños para ayudarle a comparar el uso de energía. Consulta las normas de eficiencia para obtener información sobre las clasificaciones mínimas y recuerda: El mejor sistema de calefacción es el que mejor encaje con la cualidad, ubicación e instalaciones de tu casa
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